Aquí iré poniendo mis progresos en la pieza de escenografía del concurso chinorri. En principio iba a ser una sencilla pieza modificando un poco un buda para parecer un caudillo goblin y ya, pero al entrar el mil veces maldito Suber en en concurso, pues había que hacer algo que fuese digno de yacer a su sombra, así que... procedo

Fangigh era un snotling con inquietudes, siempre acompañaba a los orcos más grandes porque hacían mejores matanzas, él, invisible como era a los ojos de cualquier otra criatura, recogía la sangre verde de los orcos, roja de los humanos, negra del caos, azul de los lagartos y la guardaba en pequeños botes que iba encontrando por ahí (sobre todo botellas de pociones vacías que encontraba por el campo de batalla).

Pero Fangigh no estaba contento, le faltaba algo... hasta que un día llegaron a una pequeña montaña rocosa donde un asentamiento enano picaba la piedra. Los tapones, obviamente, fueron masacrados, pero Fangigh encontró un tesoro... ¡un martillo de picapedrero!

En un principio pensó en esconderse para quedarse en aquel sitio cuando marchara el Waagh, pero, mientras hacía esos planes, loz muchachoz se marcharon... efectivamente, era invisible.

En el centro de la plaza había quedado, medio derruida, una estatua dedicada a algún cervecero, con su panza al aire y su cabeza incompleta... GROM! Fangigh había oído leyendas del gordo goblin del tamaño de un orco que destrozaba elfos a diestro y siniestro... ése sería el legado de Fangigh: una estatua a GROM el Panzudo.

Con unos maderos que encontró hizo una suerte de andamio, plantó un par de esporas de su sobaco para alimentarse de los hongos que de ellas salieran y se puso manos a la obra...

Jojo, qué grande, ¡me encanta!

Cita de: Elgoindy en 20 ago 2019, 13:37
...pero al entrar el mil veces maldito Suber en en concurso...

Me haces sentir culpable

Detalle de Fangight en su andamio

Primeras capas de pintura... Hay prisa

Seguimos avanzando

Máz pintura! Ez la guerra!

Jojojo, ¡me encanta!

Madre mía, qué velocidad!

A mí también me obligas a subir el listón :_)

Por falta de tiempo, carga de trabajo y vacaciones inminentes, tengo que dar por terminada la pieza.

Pronto la leyenda de que un inmundo snotling autollamado Vicen Fangigh estaba esculpiendo un ídolo al gran Grom corrió de boca en boca entre todas las tribus pielesverdes.

Héroes reunían pequeños grupos de kolegaz para encontrarlo y, aquellos que lo lograban, dicen que tenían que esperar días o semanas a que el malhumorado snotling los atendiera

-¡Eztáiz matando el arte!- gritaba si era interrumpido.

Pronto descubrieron que debían pagar un diezmo para conseguir una reunión con el veleidos artista: un trofeo de un enemigo caído, comida rancia, pintura... cualquier cosa.

Se dice que aquellos que regresaban con su favor, traían un Trapo hermosamente pintado (para los estándares goblin, claro), los cuales se mostraban orgullosos en el campo de batalla portados por los héroes que consiguieron tal hazaña.

Pero, como todo el mundo sabe, son sólo leyendas...

jejejeje felicidades

Me ha parecido una idea muy original para utilizar el típico buda de los chinos

Muy guapo si señor!

La idea es buena, la ejecución una maravilla pero la historia que hay detrás es lo que le da el punto de genialidad. Bravo!!!

Pues menos mal que no te va a dar tiempo a mas! Una maravilla!

Cuando vuelva de las vacas seguramente le meteré más cosas: un caballete perdido, telas a medio pintar, más trofeos, unos cubitos con pintura por aquí ya allí...

Pero ahora sólo puedo pensar en solete y playa!

¡Maravilloso! Y en una semana, pardiez. Increíble la vida que le da la peana y los detallitos

¿Llevarás estandartes pintados por él en tu ejército orcoide?