El 5º episodio... ¡Qué decir! El regreso a Tatooine, Mos Eisley, la cantina... pero todo muy cambiado.
Post Imperio y tras la muerte de Jabba está claro que lo que daba prosperidad a la región se acabó. Antaño un bullicio de almas, ahora es un erial salpicado de cascos imperiales empalados. La cantina no puede permitirse música en directo y tiene que permitir a droides ya no sólo entrar, sino también servir. No sé si es referencia a ello, pero me recordó ala caída de Libia e Irak cuando acabaron con Gadafi y Sadam, algo así como "sí, somos unos cabrones pero invertimos en nuestro país y tenemos a raya a los señores de la guerra". La historia de nuestro querido Mando es cada vez más Lobo Solitario y su cachorro, un magnífico western protagonizado por un ronin, personajes que, pese a parecer clichés, esconden rincones oscuros o algo más luminosos (Toro Calican cuando parece que se deja seducir por Fennec y... hace lo que hace. A mi me pilló, la verdad).
En mi opinión, cada vez mejor.