¿Veo un cráneo de caballo o es una máscara o que coj***s es eso?
¿Eres fan de los Maiden? El del medio del segundo grupo me recuerda a Eddie.
Superfreak en todo caso.

Ves bien  , es un cráneo de caballo, al parecer en la fosa donde lanzaron los cadáveres era compartida tanto por soldados como por animales de carga, la magia oscura cogió de aquí y allá para formar su Regimiento Maldito.
Pues te vas a reir, me encanta Iron Maiden pero en ningún momento tuve a Eddie en la cabeza durante el proceso, me lo comentaron posteriormente igual que tú. 
Me alegro que te hayan gustado!

Amigo, son maravillosos.

Espero que cuando vuelva por tus tierras podamos echar al menos una partidilla con ellos

A mi me parecen una bizarrada de lo más interesante. Seguro que a los Maiden les encanta

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Es tremendo. ¡El Napocalipsis! De verdad que me encanta el mero concepto, pero mucho más aún la ejecución, cómo has innovado con materiales y texturas y cómo han quedado al final. Enhorabuena

Mil gracias compañeros! así da gusto experimentar con nuevas cosillas y liarse la manta a la cabeza con temas muy poco habituales en mí.

Lo que da gusto es poder ver cosas que se apartan de lo que estamos acostumbrados.

Mira que te gusta meterte en fregados raros..., pero nos viene de lujo a algunos que somos cuadriculados para ampliar horizontes.

Muchas gracias por ayudarnos con tus locuras


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Jajajajaja no se merecen, al final lo suyo es ir creciendo en equipo y compartir este tipo de cosillas para que todos podamos salir un poco de nuestras zonas de confort.

Zona de saqueo

(Pequeño relato de la primera partida jugada a tres bandas)

Las áridas dunas cambiantes del Desierto de Óxido dejaban entrever cuantiosos montones de chatarra y despojos, unos eran enormes, otros mas pequeños, objetos de todo tipo que antaño tuvieron sus funciones pero que ahora no eran mas que espectadores inertes de toda aquella desolación. Gran parte de aquellas pilas no eran restos abandonados sino también chatarra dejada ahí voluntariamente por parte de los antiguos amos de las minas de hierro, al parecer la hendidura del terreno era ideal para usar toda aquella zona a modo de vertedero.
Pero como suele decirse, la basura de uno es el tesoro de otros, así que aquella terrible y rojiza zona era sitio de búsqueda de grupos de rapiñadores y saqueadores pero también madriguera de criaturas como mutantes y bestias de óxido que esperaban acechando a los incautos buscadores.

Por un lado estaban los hombres del Mayor Kerrigan, unos mercenarios que iban picoteando allá donde podían mientras no tenían trabajos en firme. Luego estaban los sectarios oscuros del autodenominado Necropapa, solo con ver a ese grupo de psicópatas ya se ponían los pelos de punta, y en tercer lugar una singular banda liderada por un silencioso pero letal ronin, dicen que antaño protegía a uno de los grandes Señores del Hierro pero a causa de unas terribles heridas gran parte de su cuerpo fue sustituido por partes mecánicas.

Sus objetivos estaban claros, cuantos más montones de chatarra registrasen mayor sería su beneficio, así que sin dudarlo las tres bandas se adentraron en esa mortífera zona donde grupos locales habían levantado efigies de seres demoníacos.
Para complicar más la búsqueda la zona estaba afectada por caprichosos sucesos, desde la aparición de pobladores, gigantescos gusanos de óxido que emergían del polvo al notar temblores en la superficie  y lo peor de todo, una incipiente tormenta de polvo que debilitaba y llenaba de herrumbre por momentos cualquier equipo portado haciéndolo inservible.

La acción no tardó en suceder, los disparos entre las bandas empezaron a causar efecto sobretodo entre los mercenarios del mayor Kerrigan, uno de los sectarios del Necropapa los mantenía con la cabeza agachada lanzando una terrible lluvia de proyectiles explosivos.
En otra zona un poderoso y enigmático psíquico de la banda del ronin tomaba el contro de otro sectario para que disparase a sus propios compañeros.

No fue el mejor día para los mercenarios, al poco tiempo varios de ellos acabaron incapacitados y sin haber conseguido nada de valor, al tener una de las tres bandas fuera de juego las otras dos pudieron saquear gran parte del vertedero mientras se enfrentaban sin cuartel entre ellos.
El enfrentamiento fue salvaje los dos lideres enemigos daban buena cuenta de sus enemigos en sus combates hasta que el final  lo marcó a evolución de la tormenta de polvo de óxido, era absurdo perder tanto el equipo propio como el botín saqueado así que cada banda recogió a sus heridos para poder enfrentarse en otro momento....

Mi odio hacia vos se acrecienta con el tiempo. Cada vez que veo un post de los tuyos empiezo a elucubrar cosas y a mirar webs donde comprar minis y reglamentos. Además, da la casualidad de que llevo un día entero viendo cosas varias de Sci-Fi... y vas y te calcas este informe.
¡Si acabo arruinado será por tu culpa, maldito Criamon!

Pues todo lo contrario mi buen amigo Asturvettón! puedo asegurarte que es un proyecto 100% low cost, mi banda es toda reciclada de retales (mercenarios) al igual que los sectarios de mi colega y el tercero se imprime sus propias minis en 3d. Seguro que por casa tienes figuras que nunca habías pensando en usar y restos de matrices por usar, la escenografía vale que mucha es impresa pero sin impresora pueden hacerse cosas muy buenas reciclando materiales o visitando a nuestros amigos asiáticos. Y para remate el reglamento Planet 28 es "Paga lo que quieras" en Wargames Vault, mas fácil imposible!
Muchas gracias por tu comentario

Me encanta el aire de todo esto sinsentido..Tzeentch o John Blanche (o ambos) han habitado tu sueño, sin duda

El Mercado Rojo

Una vez más llegaba el día, por unas horas parecía que una tensa calma se adueñaba de esta zona del Desierto de Óxido, una tregua pactada donde todos los habitantes de la zona tenían la oportunidad de comprar y vender desde la más inservible de las chatarras hasta el bien más preciado.
Como siempre, el Gobernador se paseaba por la zona con su antiguo pero bien cuidado vehículo, sabía que los agentes de seguridad velarían por el buen ambiente y al mínimo altercado aparecerían y no precisamente de buenos modales detendrían a los causantes.

Los tenderetes estaban a rebosar, los mercaderes gritaban a viva voz sus productos estrella esperando a que algún incauto se acercase. Planchas metálicas oxidadas, armamento de dudosa fiabilidad, ruedas de algún vehículo, hasta unos deliciosos kebab de rata del óxido, todo eso y más se podría conseguir una jornada como la de hoy, si no fuese porque mezclados con los compradores avanzaban miembros de tres bandas bien diferenciadas y ya algo conocidas en la zona.

El NecroPapa y su cuadrilla de psicópatas armados hasta los dientes, la extravagante banda del Samurai Cibernético y unos ex militares recién llegados liderados por el Sargento Fury tenían sus propios objetivos, entre ellos el preciado vehículo del Gobernador.
No sería tarea fácil, posiblemente entre ellos fuesen a por el mismo objetivo así que mientras tanto aprovecharían para buscar entre los tenderetes cualquier objeto que les pudiese ser de utilidad.

Las hostilidades no tardaron en producirse, los soldados del sargento Fury entablaron un duro tiroteo contra los secuaces del samurai y por otro lado los esbirros del NecroPapa registraban velozmente los primeros tenderetes consiguiente bienes variados. Pero registrar las cajas y montones de mercancia de los tenderetes también podía tener sorpresas desagradables como una araña mecánica o rateros de poca monta capaces de hacerte desaparecer hasta el rifle de tus propias manos sin darte cuenta.

Al poco tiempo los hombres del NecroPapa se hicieron con el coche del gobernador, los agentes de seguridad habían recibido información falsa de un altercado en una zona bastante alejada del mercado y no pudieron evitar que desapareciera el coche.

Mientras tanto, el lacónico samurai no dudó enfrentarse a los ex militares dando buena cuenta de varios de ellos, este tipo era más duro que una roca y Fury ya pensaba que necesitarían artillería pesada para intentar acabar con él.

Al final todo tuvo que apresurarse ya que se formó una peligrosa tormenta corrosiva, los mercaderes replegaron sus bienes y se protegieron en pequeños bunkers reforzados hasta que pasase la tormenta y  los miembros de las tres bandas adversarias consiguieron huir con lo que habían rapiñado en este rápido enfrentamiento.

Cuando todo se calmó, los agentes de seguridad desataron al pobre Gobernador, lo encontraron despojado de todos sus bienes y sobre todo de su vehículo, no dudó en destituir al jefe de seguridad por incompetente y otorgar la vara de mando a un curtido comisario de mandíbula cuadrada, en  la siguiente jornada de mercado no sería tan fácil desobedecer las órdenes y salir de rositas.....

Mola ver tanto tenderete y tanta rapiña.
¿Qué mesa es esa, con pasarelas hundidas, burbujas y demás?

Sigo odiándote muchísimo...

¡Mola, Criamon! Si bien las partidas anteriores en el desierto daban un aspecto de campo de batalla vacío o desangelado, aquí la cosa cambia y parece que todo tiene más vida. También puede influir ese tapete, la verdad.
¡Pero a mí lo que más me ha gustado es el cochazo!