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LAS GUERRAS DEL MEDITERRANEO

Iniciado por tioculebras, 19 Mar 2012, 08:52

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tioculebras

Desde la asociacio septimo grado de Leganes os queremos invitar a participar en nuestra campaña "Las guerras del Mediterraneo"

aqui os dejamos las bases de la misma

Las guerras del mediterráneo

Campaña para field of glory.




Esta campaña está enfocada para fomentar este juego, pero no queremos dejarlo ahí, esta campaña debe de intentar recrear otra historia, creando nuevos campos de batalla , distintos a los clásico cannas,termopilas etc, por lo que las partidas que juguemos deberán de estar documentadas,poniendo después de la batalla lo sucedido, desde su localización física en el mapa,sus características geográficas de la batalla y lo sucedido en la misma, por ejemplo, si yo tengo la iniciativa y escojo el lugar donde se realiza la batalla y escojo un tipo de terreno del oponente debo de buscar en un mapa el lugar exacto donde celebrar la batalla y después contar lo sucedido, así como poner el número estimado de cada tipo de tropas etc. etc.,
Mi idea es crear una campaña no solo de juego, sino también con su historia.

Reglas de la campaña:
1.-las partidas se jugaran a 800 puntos usando las listas de ejercito que tuviera algún tipo de relación con el mediterráneo desde el comienzo de la civilización hasta el año 375 d.c.

2.-cada jugador contara con tres ejércitos para dominar el mediterráneo, cada vez que se pierda una partida, se perderá uno de esos ejércitos, cuando dejes de tener ejércitos serás eliminado de la campaña.

3.-se podrán jugar partidas con aliados contra otro/os jugadores, para ello se deberá anunciar el ataque de la coalición con varios días de antelación para que el atacado pueda buscar aliados, si esto no sucede jugaran 2 contra uno
La confección de los ejércitos en una partida a dobles serian de 400 puntos, con u máximo de 2 generales y con la lista de aliados de sus ejércitos
La pérdida será de medio ejército en caso de ser derrotados en batalla.
Un jugador con ½ ejercito será eliminado de la campaña.

4.- tiempo de duración de la campaña: la campaña durara hasta el 30 de septiembre

5.- quien gana la campaña?, aquella civilización que cuente con mas victorias, en caso de empate, será el que cuente con mas ejércitos y si aun así se queda empate, jugaran una partida de desempate

6.-el precio de la inscripción será de 5€ para un trofeillo

LISTA DE PARTICIPANTES

1.-DIEGO ROMERO
2.-MIGUELANGEL ENGELMO

diegorg

primer resultado de la campaña , espero que os guste

La batalla de Aemilia

Una gran confederación de tribus galas unidas por el poderoso caudillo Dieguix había cruzado los Alpes y traído la destrucción a la Galia Cisalpina. Tras saquear y matar por doquier se encaminaron hacia el sur, con la intención de profanar la ciudad eterna. Ante esta amenaza el emperador llamó a sus legiones a la guerra y confió el mando de estas a su leal sobrino Cayo Junio Catedraticus, sabiendo que la traición acechaba en los corazones de otros generales más famosos. El nuevo legado se encaminó hacia el norte, encontrándose con los galos esperándolos en la agrícola región de Aemilia.

Se habían posicionado en una gran llanura, con campos dedicados al cultivo a ambos lados. Su ejército estaba compuesto por 300 carros de guerra que se extendían a lo largo de la llanura. A su derecha la caballería gala, unos 1000 jinetes pesados y 300 jinetes ligeros, y los renombrados soldurii, 1500 hombres de infantería pesada de élite. Se distinguía un grupo de 1440 aliados íberos que cubría el terreno agrícola en su flanco derecho y cuidando ambos extremos del ejército formaban dos grandes grupos de galos de 3000 hombres cada uno formados en compactas filas. 900 infantes ligeros completaban la horda bárbara de casi 12000 hombres.

Opuestos a ellos 9720 hombres leales a Roma. Los 4500 legionarios del emperador, divididos en tres grupos de 1500 hombres cada uno, formaron una gran línea cubriendo el centro del campo de batalla, apoyados en ambos flancos por 1440 arqueros y 600 jinetes ligeros y con sus 1440 auxilia cubriendo su flanco derecho, con 500 jinetes romanos haciendo lo propio en el izquierdo. 240 honderos y 1000 caballeros pesados sármatas aliados en reserva completaban las legiones.

A mediodía, tras realizar los oportunos sacrificios a Júpiter, el legado dio orden de avanzar. Las legiones avanzaron cerrando sus filas y se encararon con los carros galos y los soldurii, mientras que los caballeros sármatas maniobraban para apoyarles. Se produjeron los primeros enfrentamientos entre las tropas ligeras. Tras diversas maniobras la caballería ligera romana, malinterpretando las ordenes de su general, estuvo a punto de desordenar el avance de las legiones, pero finalmente no ocurrió nada.

Los carros galos se pasearon insolentes ante las legiones creyendo poder escapar de su justa cólera, pero la indisciplina gala y la bendición de Mercurio hizo que algunos carros fueran alcanzados por ellas aunque finalmente lograran escabullirse. Otras veces cargaban contra los legionarios pero no podían romper su muro de escudos y siempre terminaban retrocediendo. Las legiones seguían avanzando mientras los caballeros sármatas se encaraban a los jinetes galos, que rehuían el enfrentamiento.

Entonces se adelantaron los soldurii, dispuestos a enfrentarse con el primer grupo legionario. Hombres enormes cubiertos de hierro, curtidos en innumerables combate, lo mejor de las tribus galas. Con un aullido escalofriante cargaron contra las legiones y ni las flechas ni los pilum parecían detenerlos. Su ferocidad desordenó las filas de los legionarios y por un momento pareció que iban a triunfar, pero los ciudadanos de Roma recordaron su deber y no desfallecieron, sino que siguieron combatiendo.

Mientras tanto, el propio caudillo galo y varios de sus jefes reordenaron las filas de los carros y los posicionaron con la intención de romper el grupo central de legionarios, mientras otro grupo más pequeño de carros mantenía ocupado al grupo de la derecha, acercándose a ellos con la intención de rehuir el combate. Pero un grupo de arqueros a caballo romano había logrado atravesar las líneas enemigas y se posicionó a su retaguardia, impidiéndoles la huida. Los legionarios y los jinetes ligeros cargaron contra los carros y empezaron a destrozarlos hasta que finalmente rompieron sus líneas y les desbandaron.

Con un rugido atronador los 200 carros galos dirigidos por su caudillo cargaron furiosamente contra el centro de nuestro ejército y se estrellaron contra la muralla de hierro de nuestras legiones. Los carros no pudieron hacer mella en ella, mientras que nuestros hombres mataban a sus caballos para a continuación hacer lo propio con sus conductores. Finalmente Dieguix dio orden de retroceder y poner distancia entre ellos y estos temibles hombres.

Mientras tanto bajo la luz del mortecino sol de la tarde proseguía el combate entre soldurii y legionarios. Estos reorganizaron sus filas y comenzaron a hacer valer su disciplina. Las duras lecciones de esgrima impartidas por sus sádicos instructores daban ahora sus frutos y a golpe de gladius los legionarios iban acabando uno tras otro con sus enemigos, abriendo sus vientres y esparciendo sus intestinos por el suelo. A pesar de las terribles bajas los soldurii no retrocedían ni parecían desfallecer, hasta que finalmente fueron demasiado pocos para resistir y acabaron arrollados por las legiones.

Con la caída de la noche se interrumpieron los combates y el ejército se retiró a su campamento. Al amanecer salieron con el ánimo alto dispuestos a entablar batalla para descubrir que no había ni rastro del enemigo. Encontraron su campamento abandonado y con muchos galos muertos violentamente. Sin duda los malos resultados del día anterior habían puesto nerviosos a los galos y habían hecho aflorar sus antiguas rivalidades y odios, rompiendo su unión y sumando nuevos odios a los antiguos. Se retiraron de vuelta a la Galia y comenzaron nuevas guerras entre ellos que les debilitarían aún más.

¡Alabado sea Júpiter!

¡Roma Vincit!