Dieciséis años después y de madrugada decidí, guiado por no sé qué conjunción planetaria, que mis miniaturas merecían ciertos cuidados. Básicamente pictóricos. Así que sí, sí, comencé algo que no me siento capaz de terminar.

El proyecto, por llamarlo de alguna manera, como tal, no lo concibo como un Plog ni irá vinculado a un Blog. Se publicará aquí única y exclusivamente hasta que tome forma.

De momento y a falta de inclinarme por una u otra edición del celebérrimo Warhammer Fantasy dedicaré mi atención a los pinceles y a nada más y es que de todas formas, mire el libro de ejército que miré, esta docena de elfos rondan los 150 puntos.



Las primeras horas de trabajo se han ido en la preparación de las miniaturas y ha sido agotador. Soy en extremo maniático y llevar a cabo los pequeños rituales que normalmente disfruto en una única miniatura a lo largo de las doce que componen el regimiento me ha parecido una tortura.

En la próxima y espero no muy lejana actualización aparecerán los primeros esquemas de color.

¡Hasta entonces!

Hey, me parece genial que vuelvas a "echarle el guante" a esas cosas que todos dejamos en el baúl y hacemos caer en el olvido. Me encanta la idea de que sean minis de fantasy y tengo ganas de ver como las vas pintando. Mucho ánimo y no las vuelvas a dejar de lado